sábado, 12 de mayo de 2012

Un caballo piadoso...Foto Internet


Un caballo muy piadoso

        
Cierto sacerdote decidió vender su caballo. Al poco tiempo se presentó un hombre que estaba interesado en el animal.

-Debo advertirle –le dijo el clérigo- que este  caballo sólo responde al lenguaje eclesiástico. Para que corra hay que decirle Bendito sea Dios y para que se detenga ¡Aleluya!

-He trabajado con caballos toda mi vida –comentó el posible comprador, y jamás había escuchado algo así. Me gustaría probarlo.

El buen hombre se montó en él y ordenó con escepticismo: “Bendito sea Dios”. Inmediatamente el caballo comenzó a trotar. Luego repitió: “Bendito sea Dios” y el animal echó a correr. De pronto el comprador advierte que unos metros más adelante había un precipicio. Aterrado gritó “Aleluya” y se detuvieron a un paso del borde.

Entonces, respirando hondo y secándose el sudor de la frente, el jinete exclamó espontáneamente y asustado: 

¡Bendito sea Dios!

No hay comentarios:

Publicar un comentario