EN LA BARRA
Allí estaba ella, limpiando el mostrador, sirviendo las tapas de calamares, pinchos,
aceitunas… a los clientes y sonriendo siempre y con esa chispa que a mí me vuelve loco.
¡Ay, que no daría yo por nadar en esos ojos azules y balancearme en sus pestañas!
Esos labios jugosos y rojos cómo las fresas más sabrosas y carnosas…
Y me dice con esa sonrisa que… me desarma:
- ¿Qué vas a tomar?...
Y me quedo… en blanco…
Y canto a continuación...
(Escrito por ©️ MarinaDuende: para José Miguel Prieto Palomino)
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